El nuevo capítulo del caos ferroviarios asola este lunes a las principales estaciones del país y deja ya a más de 10.000 afectados por retrasos y cancelaciones en la alta velocidad, muchos de ellos incluso teniendo que haber pasado la noche dentro de un tren. El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha señalado como causante del suceso a un «acto de sabotaje» por el robo de 150 metros de cable en la línea Madrid-Sevilla el domingo, que ha afectado a los sistemas de señalización de la vía, y más tarde el presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, expuso como segundo motivo el «enganchón en la catenaria» de un tren de Iryo que dejó al resto de trenes sin energía para continuar el viaje. Una tesis que rechazan desde Iryo, que aseguran que, cuando se produjo el suceso, el tren estaba parado por la ralentización del tráfico que provocó el robo de los cables, y fue cuando reanudó la marcha cuando se detectó la falta de tensión en la catenaria, explican fuentes cercanas a la compañía. «Es imposible que fuera un enganchón porque para que se produzca el tren tiene que ir a más velocidad» ubican otras fuentes del sector.El suceso se produjo a las 21.30 a la altura de la Sagra (Toledo) en un tren que circulaba entre Madrid y Málaga (con número 6208), en este sentido. Dos horas después, se pudo realizar el trasvase de pasajeros a «un tren de rescate», que llevó a los viajeros a Málaga. Fuentes oficiales de la compañía explican por su parte «que todavía es pronto para dar una explicación técnica sobre el asunto».Sea como fuere, España vive desde ayer un nuevo capítulo del caos ferroviario, del que intenta recuperse todavía a esta hora, con graves retrasos que tendrán continuación a lo largo del día. Alrededor de las 12.00, Adif aseguraba tener restablecida la circulación entre Madrid y Andalucía, así como que «la circulación se irá normalizando progresivamente». Adif señala como causante de los retrasos a un robo de cable entre Mora y Urda y no señala a la necesidad de reponer la catenaria como motivo de las demoras.(Habrá ampliación). El nuevo capítulo del caos ferroviarios asola este lunes a las principales estaciones del país y deja ya a más de 10.000 afectados por retrasos y cancelaciones en la alta velocidad, muchos de ellos incluso teniendo que haber pasado la noche dentro de un tren. El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha señalado como causante del suceso a un «acto de sabotaje» por el robo de 150 metros de cable en la línea Madrid-Sevilla el domingo, que ha afectado a los sistemas de señalización de la vía, y más tarde el presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, expuso como segundo motivo el «enganchón en la catenaria» de un tren de Iryo que dejó al resto de trenes sin energía para continuar el viaje. Una tesis que rechazan desde Iryo, que aseguran que, cuando se produjo el suceso, el tren estaba parado por la ralentización del tráfico que provocó el robo de los cables, y fue cuando reanudó la marcha cuando se detectó la falta de tensión en la catenaria, explican fuentes cercanas a la compañía. «Es imposible que fuera un enganchón porque para que se produzca el tren tiene que ir a más velocidad» ubican otras fuentes del sector.El suceso se produjo a las 21.30 a la altura de la Sagra (Toledo) en un tren que circulaba entre Madrid y Málaga (con número 6208), en este sentido. Dos horas después, se pudo realizar el trasvase de pasajeros a «un tren de rescate», que llevó a los viajeros a Málaga. Fuentes oficiales de la compañía explican por su parte «que todavía es pronto para dar una explicación técnica sobre el asunto».Sea como fuere, España vive desde ayer un nuevo capítulo del caos ferroviario, del que intenta recuperse todavía a esta hora, con graves retrasos que tendrán continuación a lo largo del día. Alrededor de las 12.00, Adif aseguraba tener restablecida la circulación entre Madrid y Andalucía, así como que «la circulación se irá normalizando progresivamente». Adif señala como causante de los retrasos a un robo de cable entre Mora y Urda y no señala a la necesidad de reponer la catenaria como motivo de las demoras.(Habrá ampliación).
nuevo capítulo del caos ferroviario
El suceso se produjo ayer a las 21.30 cuando ya se producían grandes retrasos por el robo de 150 metros de cable en la línea de alta velocidad Madrid-Sevilla
El nuevo capítulo del caos ferroviarios asola este lunes a las principales estaciones del país y deja ya a más de 10.000 afectados por retrasos y cancelaciones en la alta velocidad, muchos de ellos incluso teniendo que haber pasado la noche dentro de un tren. El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha señalado como causante del suceso a un «acto de sabotaje» por el robo de 150 metros de cable en la línea Madrid-Sevilla el domingo, que ha afectado a los sistemas de señalización de la vía, y más tarde el presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, expuso como segundo motivo el «enganchón en la catenaria» de un tren de Iryo que dejó al resto de trenes sin energía para continuar el viaje.
Una tesis que rechazan desde Iryo, que aseguran que, cuando se produjo el suceso, el tren estaba parado por la ralentización del tráfico que provocó el robo de los cables, y fue cuando reanudó la marcha cuando se detectó la falta de tensión en la catenaria, explican fuentes cercanas a la compañía. «Es imposible que fuera un enganchón porque para que se produzca el tren tiene que ir a más velocidad» ubican otras fuentes del sector.
El suceso se produjo a las 21.30 a la altura de la Sagra (Toledo) en un tren que circulaba entre Madrid y Málaga (con número 6208), en este sentido. Dos horas después, se pudo realizar el trasvase de pasajeros a «un tren de rescate», que llevó a los viajeros a Málaga. Fuentes oficiales de la compañía explican por su parte «que todavía es pronto para dar una explicación técnica sobre el asunto».
Sea como fuere, España vive desde ayer un nuevo capítulo del caos ferroviario, del que intenta recuperse todavía a esta hora, con graves retrasos que tendrán continuación a lo largo del día. Alrededor de las 12.00, Adif aseguraba tener restablecida la circulación entre Madrid y Andalucía, así como que «la circulación se irá normalizando progresivamente». Adif señala como causante de los retrasos a un robo de cable entre Mora y Urda y no señala a la necesidad de reponer la catenaria como motivo de las demoras.
(Habrá ampliación).
RSS de noticias de economia