Será, como poco, el juicio del año. El magnate del rap Sean ‘Diddy’ Combs se sentará a partir del lunes en el banquillo de acusados en el inicio de su proceso tras ocho largos meses en prisión por presuntos delitos de a buso sexual y tráfico de mujeres , entre otros, en una batalla legal que promete largos y escabrosos debates a medida que vayan conociéndose los testimonios.Durante todo este tiempo, se han ido publicando numerosas frases aparecidas en las denuncias de la acusación a cargo de mujeres y hombres afectados por las presuntas actuaciones del rapero y aquellas escandalosas fiestas que celebraba, conocidas como ‘ freak offs ‘. Y en estos meses, y con razón o sin ella, alrededor del caso han ido saliendo nombres tan populares como los de Leonardo DiCaprio, Jay-Z, Beyoncé, Jennifer Lopez, Justin Bieber y muchos más .Noticias relacionadas Debbie Rowe, exmujer de Michael Jackson, irreconocible tras superar un cáncer A.B. Buendía La tía de los hermanos Menéndez, encontrada inconsciente en una habitación de hotel en Los Ángeles A.B. BuendíaDurante décadas, Sean ‘Diddy’ Combs reinó como artista y empresario. Era la imagen misma del poder. Pero ahora, a sus 55 años y tras amasar una fortuna de mil millones de dólares, es un hombre al borde del precipicio y con muchas cosas que aclarar mientras pasea unos cabellos grises que antes eran negros por un laberinto de pasillos y barrotes en prisión.«Un Puff Daddy en la cárcel»Ocho meses después de ser arrestado en el vestíbulo de un hotel de cinco estrellas de Manhattan, el recluso 37452-054 será juzgado a partir del lunes en el tribunal del Distrito Sur de Nueva York por crimen organizado, tráfico sexual y otros cargos , tras haber abusado presuntamente de numerosas personas a lo largo de su vida. La selección del jurado comenzará el 5 de mayo y se espera que el proceso se prolongue durante ocho semanas.Durante todo este tiempo, Sean ‘Diddy’ Combs ha mantenido la misma pose desafiante de la que ha hecho bandera toda su vida. «Soy un Puff Daddy en la cárcel», le dijo en marzo a Kanye West en una llamada filtrada hecha desde prisión. Allí convive en una unidad estilo dormitorio en un cuarto piso del Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn que comparte con otros 20 hombres más . Antes, en su mansión, tenía 20 habitaciones para él solo.«Si lo declaran culpable de los cargos más graves, podría ir a prisión durante 15 años o incluso cadena perpetua , aunque la pena máxima sería improbable», ha asegurado la revista ‘People’ tras consultar fuentes cercanas al caso. «La gran cantidad de víctimas, los años y el patrón de abuso, y la evidencia electrónica que implica a Combs hacen que este sea un caso difícil de defender », ha explicado el abogado y exfiscal federal Neama Rahmani.La extrema confianza de DiddySin embargo, sus abogados aseguran que Sean ‘Diddy’ Combs está «ansioso» por declarar por los cinco cargos por delitos graves, incluyendo tráfico sexual, crimen organizado y transporte para ejercer la prostitución. «Espero una larga batalla con un buen resultado. Combs es una persona imperfecta, pero no un criminal », ha dicho su abogado, Marc Agnifilo.La fiscalía presenta un retrato más sombrío y le describe como el cabecilla de « una violenta red vinculada a presuntos secuestros, incendios provocados, delitos de drogas y abusos sexuales generalizados». Según la acusación, Combs y sus socios están acusados de atraer a las víctimas – menores de edad incluso – con promesas de romance y luego usar la fuerza, amenazas y coacción para obligarlas a tener relaciones sexuales en las llamadas fiestas ‘freak off’.« Está muy ansioso por contar su historia », confirma ahora Marc Agnifilo. Pero testificar sometería a Combs a un contrainterrogatorio y haría que sus palabras fueran admisibles en más de 60 casos civiles pendientes . Será el juicio del año, con un desarrollo y consecuencias absolutamente imprevisibles, dada la naturaleza de los hechos… y del propio acusado. Será, como poco, el juicio del año. El magnate del rap Sean ‘Diddy’ Combs se sentará a partir del lunes en el banquillo de acusados en el inicio de su proceso tras ocho largos meses en prisión por presuntos delitos de a buso sexual y tráfico de mujeres , entre otros, en una batalla legal que promete largos y escabrosos debates a medida que vayan conociéndose los testimonios.Durante todo este tiempo, se han ido publicando numerosas frases aparecidas en las denuncias de la acusación a cargo de mujeres y hombres afectados por las presuntas actuaciones del rapero y aquellas escandalosas fiestas que celebraba, conocidas como ‘ freak offs ‘. Y en estos meses, y con razón o sin ella, alrededor del caso han ido saliendo nombres tan populares como los de Leonardo DiCaprio, Jay-Z, Beyoncé, Jennifer Lopez, Justin Bieber y muchos más .Noticias relacionadas Debbie Rowe, exmujer de Michael Jackson, irreconocible tras superar un cáncer A.B. Buendía La tía de los hermanos Menéndez, encontrada inconsciente en una habitación de hotel en Los Ángeles A.B. BuendíaDurante décadas, Sean ‘Diddy’ Combs reinó como artista y empresario. Era la imagen misma del poder. Pero ahora, a sus 55 años y tras amasar una fortuna de mil millones de dólares, es un hombre al borde del precipicio y con muchas cosas que aclarar mientras pasea unos cabellos grises que antes eran negros por un laberinto de pasillos y barrotes en prisión.«Un Puff Daddy en la cárcel»Ocho meses después de ser arrestado en el vestíbulo de un hotel de cinco estrellas de Manhattan, el recluso 37452-054 será juzgado a partir del lunes en el tribunal del Distrito Sur de Nueva York por crimen organizado, tráfico sexual y otros cargos , tras haber abusado presuntamente de numerosas personas a lo largo de su vida. La selección del jurado comenzará el 5 de mayo y se espera que el proceso se prolongue durante ocho semanas.Durante todo este tiempo, Sean ‘Diddy’ Combs ha mantenido la misma pose desafiante de la que ha hecho bandera toda su vida. «Soy un Puff Daddy en la cárcel», le dijo en marzo a Kanye West en una llamada filtrada hecha desde prisión. Allí convive en una unidad estilo dormitorio en un cuarto piso del Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn que comparte con otros 20 hombres más . Antes, en su mansión, tenía 20 habitaciones para él solo.«Si lo declaran culpable de los cargos más graves, podría ir a prisión durante 15 años o incluso cadena perpetua , aunque la pena máxima sería improbable», ha asegurado la revista ‘People’ tras consultar fuentes cercanas al caso. «La gran cantidad de víctimas, los años y el patrón de abuso, y la evidencia electrónica que implica a Combs hacen que este sea un caso difícil de defender », ha explicado el abogado y exfiscal federal Neama Rahmani.La extrema confianza de DiddySin embargo, sus abogados aseguran que Sean ‘Diddy’ Combs está «ansioso» por declarar por los cinco cargos por delitos graves, incluyendo tráfico sexual, crimen organizado y transporte para ejercer la prostitución. «Espero una larga batalla con un buen resultado. Combs es una persona imperfecta, pero no un criminal », ha dicho su abogado, Marc Agnifilo.La fiscalía presenta un retrato más sombrío y le describe como el cabecilla de « una violenta red vinculada a presuntos secuestros, incendios provocados, delitos de drogas y abusos sexuales generalizados». Según la acusación, Combs y sus socios están acusados de atraer a las víctimas – menores de edad incluso – con promesas de romance y luego usar la fuerza, amenazas y coacción para obligarlas a tener relaciones sexuales en las llamadas fiestas ‘freak off’.« Está muy ansioso por contar su historia », confirma ahora Marc Agnifilo. Pero testificar sometería a Combs a un contrainterrogatorio y haría que sus palabras fueran admisibles en más de 60 casos civiles pendientes . Será el juicio del año, con un desarrollo y consecuencias absolutamente imprevisibles, dada la naturaleza de los hechos… y del propio acusado.
Tras ocho meses en prisión, este lunes comienza el proceso por presuntos delitos de abuso sexual, tráfico y más
Su equipo de abogados advierte que está loco por defenderse, aunque avisan de los peligros
Será, como poco, el juicio del año. El magnate del rap Sean ‘Diddy’ Combs se sentará a partir del lunes en el banquillo de acusados en el inicio de su proceso tras ocho largos meses en prisión por presuntos delitos de abuso sexual y tráfico de mujeres, entre otros, en una batalla legal que promete largos y escabrosos debates a medida que vayan conociéndose los testimonios.
Durante todo este tiempo, se han ido publicando numerosas frases aparecidas en las denuncias de la acusación a cargo de mujeres y hombres afectados por las presuntas actuaciones del rapero y aquellas escandalosas fiestas que celebraba, conocidas como ‘freak offs‘. Y en estos meses, y con razón o sin ella, alrededor del caso han ido saliendo nombres tan populares como los de Leonardo DiCaprio, Jay-Z, Beyoncé, Jennifer Lopez, Justin Bieber y muchos más.
Durante décadas, Sean ‘Diddy’ Combs reinó como artista y empresario. Era la imagen misma del poder. Pero ahora, a sus 55 años y tras amasar una fortuna de mil millones de dólares, es un hombre al borde del precipicio y con muchas cosas que aclarar mientras pasea unos cabellos grises que antes eran negros por un laberinto de pasillos y barrotes en prisión.
«Un Puff Daddy en la cárcel»
Ocho meses después de ser arrestado en el vestíbulo de un hotel de cinco estrellas de Manhattan, el recluso 37452-054 será juzgado a partir del lunes en el tribunal del Distrito Sur de Nueva York por crimen organizado, tráfico sexual y otros cargos, tras haber abusado presuntamente de numerosas personas a lo largo de su vida. La selección del jurado comenzará el 5 de mayo y se espera que el proceso se prolongue durante ocho semanas.
Durante todo este tiempo, Sean ‘Diddy’ Combs ha mantenido la misma pose desafiante de la que ha hecho bandera toda su vida. «Soy un Puff Daddy en la cárcel», le dijo en marzo a Kanye West en una llamada filtrada hecha desde prisión. Allí convive en una unidad estilo dormitorio en un cuarto piso del Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn que comparte con otros 20 hombres más. Antes, en su mansión, tenía 20 habitaciones para él solo.
«Si lo declaran culpable de los cargos más graves, podría ir a prisión durante 15 años o incluso cadena perpetua, aunque la pena máxima sería improbable», ha asegurado la revista ‘People’ tras consultar fuentes cercanas al caso. «La gran cantidad de víctimas, los años y el patrón de abuso, y la evidencia electrónica que implica a Combs hacen que este sea un caso difícil de defender», ha explicado el abogado y exfiscal federal Neama Rahmani.
La extrema confianza de Diddy
Sin embargo, sus abogados aseguran que Sean ‘Diddy’ Combs está «ansioso» por declarar por los cinco cargos por delitos graves, incluyendo tráfico sexual, crimen organizado y transporte para ejercer la prostitución. «Espero una larga batalla con un buen resultado. Combs es una persona imperfecta, pero no un criminal», ha dicho su abogado, Marc Agnifilo.
La fiscalía presenta un retrato más sombrío y le describe como el cabecilla de «una violenta red vinculada a presuntos secuestros, incendios provocados, delitos de drogas y abusos sexuales generalizados». Según la acusación, Combs y sus socios están acusados de atraer a las víctimas –menores de edad incluso– con promesas de romance y luego usar la fuerza, amenazas y coacción para obligarlas a tener relaciones sexuales en las llamadas fiestas ‘freak off’.
«Está muy ansioso por contar su historia», confirma ahora Marc Agnifilo. Pero testificar sometería a Combs a un contrainterrogatorio y haría que sus palabras fueran admisibles en más de 60 casos civiles pendientes. Será el juicio del año, con un desarrollo y consecuencias absolutamente imprevisibles, dada la naturaleza de los hechos… y del propio acusado.
RSS de noticias de gente